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Izquierda Unida denuncia la supresión del 13% de las paradas cebándose en las zonas más pobladas.

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El portavoz de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Burgos, Raúl Salinero, ha criticado la elaboración del proyecto de ejecución de las líneas de autobuses que entrarán en funcionamiento en las próximas semanas.

El nuevo proyecto de ejecución de autobuses cumple, a juicio de Salinero, “uno de los principios de Rebollo, el principio de lo absurdo”. Y es que se ha elaborado un proyecto de ejecución y un presupuesto sin conocer las nuevas líneas, una información que se ha negado a la empresa redactora del proyecto. En este sentido, subrayó que ni siquiera la empresa que ha redactado el proyecto de supresión de paradas tuviera conocimiento del nuevo mapa de líneas. «El proyecto se ha tardado en redactar porque se ocultó a los proyectistas la distribución de las líneas para que no hubiera fugas de información a los concejales de la oposición ni a los vecinos». El concejal ha entorpecido la redacción del proyecto porque iba cambiando las paradas y las líneas.

Según Salinero, el Equipo de Gobierno no quería ninguna filtración en la nueva distribución de las líneas de autobuses para evitar así las posibles críticas de la ciudadanía.

Aunque, a día de hoy, se desconoce dicha distribución, el proyecto de ejecución ya plantea la eliminación de 80 paradas de autobuses y colocar 19 nuevas. Esto significa que Burgos perderá el 13% de las 500 paradas actuales.

Zonas como “coprasa”, Capiscol, la Avenida de Castilla y León o Río Vena son, según explica Salinero, algunas de las más afectadas.

El portavoz de Izquierda Unida critica las motivaciones y avanza que el Equipo de Gobierno justificará el recorte en la optimización del servicio cuando el propio Salinero achaca esta reducción a la falta de interés por invertir en el transporte público.

 

Fuente: Activa Burgos.

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