Burgos Ciudad

IU pide la dimisión del Concejal Rebollo por negar que dio la orden de pagar las fianzas de los autobuses de desecho.

  • El edil niega haber autorizado abonar ninguna cantidad a la EMT

  • Firmó dos resoluciones instando los pagos el 26 de julio y el 5 de agosto

El Concejal de IU, Raúl Salinero, reclama la dimisión del edil de Transporte por negar en el consejo de SAMYT que acudir a la subasta implicaba depositar algún tipo de fianza.

Dibujo

El fiasco de la compra de autobuses de desecho persigue al concejal de Transporte, Esteban Rebollo. Cuando los ecos de su gestión, recusada implícitamente por el alcalde, parecía que amainaban afloran nuevos datos de la operación que vuelven a colocarle en el ojo del huracán.

Dos resoluciones firmadas por el edil y también presidente del Servicio Municipalizado de Accesibilidad, Movilidad y Transporte (SAMYT) dejan al descubierto que cuando parte del equipo de gobierno desconocía que se  pujaba por seis autobuses de segunda mano de Madrid, Esteban Rebollo ya sabía que le habían adjudicado seis vehículos Renault y ordenaba dos pagos por un total de 5.991 euros en concepto de fianza. Y no es la única contradicción en la que ha caído el edil. La más importante es que ayer mismo Rebollo seguía negando el pago de cualquier cantidad a la EMT. «Nada de nada», decía al tiempo que mantenía que no podía ordenar ningún pago para una operación que requería «tener presupuesto, informe jurídico y técnico». El político va más allá y tacha de «imposible» la posibilidad de pagar a la EMT sin haber inspeccionado antes los vehículos.

Pero sus resoluciones, que no han sido revocadas por el consejo y son las que figuran en esta información, aún deparan más sorpresas. Las fechas en que se adoptaron hablan del sigilo con el que se desarrollo la puja y algunas incongruencias con las declaraciones del propio concejal.

El primer pago se decidió el 26 de julio, cuando Madrid  ya había adjudicado los autobuses a Burgos. En esas fechas el responsable de Transportes reconocía que se estaba sopesando la posibilidad de acudir a la subasta para renovar con autocares usados la flota urbana de Burgos pero no que ya se hubiera producido la adjudicación. La segundo fianza se decreto el 5 de agosto, dos días antes de que los técnicos municipales se desplazaran a Madrid para inspeccionar los vehículos que se iban a adquirir y cuyo dictamen tiró por tierra la operación en solo 24 horas.

El día de la firma de la orden de pago Rebollo ya sabía que los autobuses estaban adjudicados a Burgos y por esos la EMT, que le había comunicado su resolución el 30 de julio, la reclamaba el pago del 15% de la compra en concepto de arras penales.

“No he ordenado pagar nada de nada a la EMT”, insistía ayer el edil de Transporte.

El concejal Rebollo siempre ha negado que el intento de compra de autobuses usados a Madrid haya tenido un coste para las arcas municipales de Burgos. EN el último consejo de administración de SAMYT, el 19 de agosto, a preguntas del edil de Izquierda Unida, Raúl Salinero, volvió a negar que se hubiera tenido que depositar algún tipo de fianza para optar a la subasta de los vehículos.

UN CONCEJAL POR LIBRE.

Este cúmulo de contradicciones han levantado en armas a la oposición, que desde afloro la polémica reclama la dimisión del político y su salida del equipo de gobierno. EL representante de IU en el Consistorio es el más contundente al declarar que ha llegado la hora de destituir de una vez a Rebollo, el concejal que se vanagloria de sus operaciones aduciendo que él tampoco sabe “qué hace Licencias u otras áreas”.

El propio Alcalde, Javier Lacalle, en su retorno al curso político reconoció que no se había actuado bien con la compra de los autobuses usados y reprocha a su concejal, eso sí sin mencionar su nombre, que se hubiera lanzado a la compra sin constatar previamente su estado o idoneidad para que entraran en servicio en Burgos.

VEHÍCULOS “IRREPARABLES”.

En apenas 48 horas la participación de Burgos en la subasta para adquir autobuses usados en Madrid dio giro inesperado.

El 5 de agosto se ordenó pagar 4.991 euros de fianza.

El 7 de agosto los técnicos viajaron a Madrid para inspeccionar los autocares.

El 8 agosto todo salto por los aires y se aborto la compra. Las razones se sustentan en el informe de los técnicos municipales. Lo que vieron ambos en su viaje relámpago fue fulminante y aconsejaron no admquiris unos vehículos con daños “irrepareables”. Su dictamen es clarificador. “varias lunas eran irrecuperables porque estaban dañadas por efeco de los ácidos, los pisos estaban agrietados y las tapicerías de los asientos rotos”. Eso en un análisis somero, porque no se valoro la parte mecánica y eléctrica, Solo un vistazo al motor. Los técnicos no dudaron: ponerlos en servicio en Burgos requería que se paga en reparaciones la misma cantidad que costaban en la subasta: 5.500 euros cada una.

Fuente: Correo de Burgos de C.M.

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