IU Burgos apuesta por la consulta popular respecto a la reforma de la plaza de toros
Izquierda Unida prioriza la consulta popular para que la gente decida si quiere o no que se realicen las obras para la reforma de la plaza de toros. Raúl Salinero, representante del Grupo Municipal de IU burgos, se ha posicionado en contra por la crítica situación económica que vive el Ayuntamiento.
Salinero recuerda que el precio rondará los seis millones de euros y, teniendo en cuenta el estado de las arcas del Ayuntamiento, estas grandes inversiones deberían ser consultadas.
«No vale con decir que lo llevaba en el programa electoral de 2011, ni que fueron democráticamente elegidos, ni que los votos le dan la legalidad para hacerlo porque la situación ha cambiado mucho», opina. «En 2011 no sabíamos que teníamos una deuda de 56 millones de euros con proveedores y eso cambia las reglas del juego».
Salinero asegura que para reglamentar la consulta popular «no hace falta nada porque las normas de participación ciudadana ya establecen cómo se debe hacer y cómo hay que llevarla a cabo». De esta forma, se podría saber «qué es lo que quiere el ciudadano y lo que no porque al final son ellos quienes pagarán esos seis millones de euros», sostiene.
«En una primera fase -apunta-, ya que si de verdad se quiere convertir el coso en un espacio multiusos hay que hacer otra inversión para el equipamiento y para otras obras como el acceso a la pista, los vestuarios y el propio coso».
Antes de la consulta popular, «habría que llevar a cabo una fase de información». Esta comunicación debería hacerse «con sinceridad, presentando el proyecto y diciendo cuánto cuesta, incluyendo el equipamiento que se necesitará».
Subraya que sería de especial interés que los grupos que van a hacer uso de esas instalaciones, «como el Tizona y otros conjuntos deportivos o taurinos lo conozcan en profundidad».
Salinero propone que toda esa información se haga llegar a los burgaleses «de la forma más barata y sencilla». Cita como ejemplo los medios de comunicación y las exposiciones en centros municipales que terminarían con un debate.
«Pero no de las fuerzas políticas, que ya tenemos la oportunidad de expresar nuestra opinión en los medios, sino de los agentes sociales y económicos de la ciudad. Incluyendo los representantes del Tizona y «los que se presupone que van a hacer uso de ese espacio».
Respecto a la pregunta que se plantearía a los ciudadanos, Salinero contempla dos cuestiones: «¿Quiere la remodelación de la plaza? y ¿está de acuerdo con el proyecto? O viceversa porque hay gente que estando de acuerdo con el proyecto y no quiera que se realice esa inversión en este momento».
Fuente: El Correo de Burgos