CETABSA, el último «pelotazo» de la factoría Méndez.

Desde Izquierda Unida Burgos queremos denunciar ante la opinión pública estas inmorales prácticas de negocio a costa del erario público y, por tanto, en perjuicio de la mayor parte de la ciudadanía.

En los medios de comunicación locales ha salido una noticia que nos ha llamado a Izquierda Unida Burgos mucho la atención y nos es otra que la adjudicación de la ampliación de la Aduana de nuestra ciudad por un montante de casi siete millones de euros a una UTE y, aquí viene lo más sorprendente, con una reducción sobre el valor de licitación inicial de en torno al 40%.

Ante ello, nos planteamos varias consideraciones:

– la primera sobre quién gestiona la Aduana burgalesa, que no es otra que una de esas empresas semipúblicas, CETABSA, (un ejemplo claro de administración paralela), donde los mayores contribuyentes son por orden de aportaciones, el Ayuntamiento de la capital, la Diputación Provincial y la Junta de Castilla-León, sin que éstas den muchas explicaciones sobre el balance económico de dicha sociedad ni exista una transparencia clara de sus números. Esto ya nos parece de por sí bastante grave.

 – Pero ahí no se queda el asunto. La siguiente interrogante es todavía más grave y hace referencia a cómo es posible que se hayan concedido estas importantes obras con una reducción tan drástica del presupuesto inicial aprobado, sin que se considere, como sucede en otros casos, una «baja temeraria». Es por ello que nos ponemos en contacto con personas y empresas del mundo de la construcción y obra civil de nuestra ciudad, que nos van señalando de forma clara dónde está el secreto de esta sorprendente «rebaja». No estriba tanto en los frecuentes y temidos «rectificados», que también, como en algo más profundo que vamos a intentar explicar.

Para ello, nos hacen ver estas solventes fuentes, tenemos que fijarnos en un aspecto que suele pasar bastante desapercibido como es la empresa autora del proyecto que, casualmente, es la misma que realizó, entre otras muchas, el del desvío del ferrocarril en Burgos y su carísimo bulevar y la encargada asimismo de la dirección de obra: MBG Ingeniería y Arquitectura el círculo se va cerrando.

– Pero, en definitiva, ¿en dónde está el negocio? La táctica es aparentemente muy sibilina, pero bastante más frecuente de lo que pueda parecer. En la redacción del proyecto se inflan desproporcionadamente los precios, con lo cual éste se dispara y la mayor parte de las empresas que optan a la obra se ajustan a ese presupuesto tan elevado, mientras que unas pocas, conocedoras de esa inflación artificial, compiten con enorme ventaja y éxito, pues bajan ese precio licitado mucho.

Por lo que nos dicen estas fuentes consultadas esta práctica ya fue habitual en el tema del bulevar y parece que ha creado «escuela». Para que nos hagamos una idea, los cálculos que nos han hecho en el desvío del ferrocarril hablan de que la urbanización del mismo hubiera tenido que salir alrededor de unos sesenta euros el metro cuadrado y algún tramo se licitó sobre los trescientos euros, adjudicándose a empresas afines a los redactores del proyecto en un precio intermedio, que multiplicaba por tres el coste lógico.